El cristal tiene un grosor de 10m.m. y le damos un tratamiento templado para que adquiera seguridad y dureza.
Las puertas de cristal templado con acabado mate al ácido permiten dar intimidad y ocultar aquellas partes de la casa que no queremos que vean los invitados. Son perfectas para despachos, cocinas, baños, ya que dejan pasar la luz y aportan luminosidad, pero a su vez son traslucidas a la vista.